Revista Digital de El Quinto Hombre

LAS DIMENSIONES DEL TIEMPO

                                                                                 

Por Mario F. Hlavanda - Argentina 




Es mi deseo esclarecer en lo posible la problemática del tiempo, tema verdaderamente apasionante, del cual se están planteando interesantes teorías.
Comenzaré por definir al tiempo como a una continua sucesión de dimensiones. Una dimensión es un plano que se extiende hacia el infinito en largo, ancho y alto y ocupa un instante preciso en el Universo.
Al apretar el disparador de una cámara fotográfica, sin darnos cuenta captamos en la placa a una dimensión, aunque sólo en una pequeña parte.
Se la podría definir como la medida más pequeña del tiempo. Existen ciertas reglas para  controlar el tiempo, algunas de ellas son:
1)      Todo cuerpo vibra a cierta frecuencia variable.
2)      A medida que esta frecuencia aumente, el tiempo se irá deteniendo 3)      Al vibrar a la velocidad de la luz, el tiempo se detiene por completo.
4)      Si la frecuencia sobrepasara esta velocidad, el cuerpo sería transportado al cosmos negativo (pasado).
5)      A medida que esta frecuencia disminuya, el tiempo pasará más rápidamente (futuro)
6)      La velocidad de la luz está compuesta por un máximo de vibraciones y un mínimo de tiempo.
7)      Un mínimo de vibraciones produce un máximo de tiempo.
8)      Al superar la velocidad de la luz, la materia cambia su signo por el contrario.
9)      Desde un punto de vista general, en el cosmos positivo las cosas se mueven para un lado y en el negativo para el otro.
10)  Para ver el cosmos desde un punto de vista general, al cambiar un cuerpo de universo, debería conservar su signo original, cosa imposible, ya que al cambiar de dimensión, automáticamente se cambia el signo del cuerpo. Si se podría conservar el signo original en otra dimensión, se produciría un  choque entre los dos cosmos, provocando así la destrucción del universo.

Ahora bien: ¿Podríamos entonces viajar al pasado y al futuro con ayuda de estos conocimientos? Técnicamente es factible.

Sabemos que al girar al cuerpo a velocidades superiores a la de la luz, manteniendo sus moléculas su consistencia y coherencia para que no se separen y se mezclen en distinto orden, podríamos transportarlo al pasado.
Para lograr esto se necesita un fuerte campo magnético y, por consiguiente, una enorme cantidad de energía.
Existen varios problemas que actualmente se hallan en estudio, por ejemplo, que la enorme cantidad de energía pudiese matarnos; por lo tanto este método sería perfecto para transportar metales.
También la fuerza centrífuga producida por la rotación hace que las moléculas tiendan a expandirse, lo que es un verdadero inconveniente. Hay testimonios de viajes al pasado o al futuro en la antigüedad, a través de las llamadas "Puertas Dimensionales", de las cuales (según leyendas) se decía que extraños personajes al pasar por ellas desaparecían en medio de un fulgor, dejando una estela de humo. Un ejemplo es la llamada "Puerta del Sol" de los incas.

Otro sistema para viajar al pasado es hacer que las moléculas vibren a velocidades superiores a la de la luz.
Esto se podría lograr por medio de  técnicas vibratorias que aún están en estudio. Para viajar al futuro se aplica esto inversamente, o sea, se paralizarían las moléculas del cuerpo, anulando todo tipo de vibraciones.
Para el que se sometiese a este proceso el tiempo pasaría a gran velocidad, o sea, pasarán varios siglos en pocos segundos, pero para la demás gente el tiempo transcurriría sin variantes, y varias generaciones podrán ver al viajero en su estado de inmovilidad.
Actualmente se investiga esta posibilidad para aplicarla en astronáutica, en viajes en los cuales es imposible llegar vivo por las enormes distancias siderales (hibernación).

Todavía queda mucho por investigar en este campo, pero, como siempre, la ciencia dirá la última palabra para satisfacer el enorme afán de aquel homo sapiens, en busca de quebrantar los misterios del Universo.

El Quinto Hombre