Revista Digital de El Quinto Hombre

LAS VISITAS DEL HOMBRE BLANCO EN AMERICA  EN TIEMPOS PRECOLOMBINOS -   La teoría de Jacques de Mahieu

 

 Investigación recopilatoria de Brad Hunter

 

Jacques de Mahieu antropólogo y sociólogo, director del Instituto de Ciencia del Hombre de Buenos Aires, dedicó muchos años de su vida al estudio de las culturas precolombinas de América. Después de meticulosos análisis logró establecer una hipótesis de trabajo basada en la presencia del hombre blanco en el Continente Americano. En su libro "El Gran Viaje del Dios-Sol", expone vasta evidencia de esta visita del hombre ario nórdico a América. En su obra el antropólogo, desarrolla esta teoría después de 25 años de investigaciones, en las cuales aporta suficiente evidencia como para confirmar que los "dioses blancos" de las tradiciones mejicanas y peruanas, eran en realidad vikingos, originarios de Schleswing, que en el año 967 de la era Crística, llegaron a las costas del continente. Estos exploradores nórdicos, se habrían luego, trasladado al Altiplano Andino en donde fundaron el imperio preincaico de Tiahuanaco. Las pistas de est arribo tan particular, lo llevaron a las tierras de Paraguay y Brasil en las cuales halló monumentos e inscripciones rúnicas, de indudable origen escandinavo. En estos países desentrañó el linaje genético de aborígenes de origen vikingo. Mahieu destaca además el singular hallazgo en las cuevas de la Península de Paracas, Perú, de momias con estructuras óseas de características arias y que conservan su cabellera rubia. En el museo de La Plata, Argentina, también se conservan momias con cabelleras rubias y características físicas nórdicas, detalle que evidencia la presencia de una raza aria, en tiempos precolombinos. Los nativos de la tribu de los Comechingones, que habitaba el centro argentino, también presentan características del tipo europeo. Su barba clara era característica y al arribar los españoles a sus dominios, llamó su atención los rasgos muy particulares de esta tribu en relación al resto de los aborígenes americanos.

Existen teorías que arriesgan aún mucho más, las cuales hacen referencia a una posible descendencia aria proveniente de la mítica Thule Hiperbórea. No supone ninguna fantasía, aceptar estas teorías, ya que existe fuerte evidencia de que los vikingos llegaron a América antes que los españoles. Para ello se habrían beneficiado de un proceso climatológico muy favorable, que habría tenido lugar entre los siglos XI y XII.

En la América precolombina, existe una leyenda, originaria de la Península de Yucatán en la que se cuenta la llegada de los hombres blancos a sus costas, en grandes barcos, que brillaban como si fueran de oro y se deslizaban sobre las olas al igual que gigantescas serpientes. Cuenta la leyenda que los seres que salieron de estos barcos eran altos, hermosos, sus ojos eran de color azulado y que todos portaban unas extrañas vestimentas. Sobre sus frentes llevaban una insignia compuesta por dos serpientes enlazadas. Los extraños fueron tan generosos, que buscaron a los sabios mayas para comunicarles grandes conocimientos.

Otra teoría supone que el clan Saint Clair, cuya descendencia sería de origen vikinga, habría utilizado los conocimientos de sus antepasados para permitir la llegada  a América de la flota Templaria. Se sabe también que los marinos portugueses del siglo XII tenían prohibido navegar más allá de Cabo Mogador si no llevaban el pabellón del Temple. Precisamente Vasco de Gama comandaba una flotilla perteneciente a los Templarios reformados cuando descubrió la India. En referencia a la cruz templaria, una de las cosas que más asombró a los comentaristas religiosos, que acompañaron a Colón, fue que los indios no se extrañaron al ver la cruz, como tampoco al contemplar a los caballeros armados. Se diría que los estaban esperando, debido a que en algunas de sus tradiciones se hablaba de que "llegará un día en el que vendrán por el mar grandes hombres, vestidos de metal, que cambiarán nuestras vidas para bien". Estas leyendas habrían facilitado las cosas a Hernán Cortéz, quién encontró un gran apoyo entre los nativos gracias a estas creencias. En particular, la leyenda de Quetzalcóatl, habla de un dios blanco, el que para muchos habría sido confundido con Cortéz.


Objetos ornamentales procedentes de la isla sueca de Gotland, Estocolmo

Andrew Sinclair expone en su libro "La Espada y el Grial" contundentes pruebas sobre la existencia de asentamientos precolombinos en América del Norte de inequívoco origen Templario. Este grupo templario habría utilizado viejas rutas vikingas, en plan de fuga de la persecución religiosa. Según Sinclair, el príncipe escocés Henry de Saint Clair habría llegado a América en un barco de la Orden Templaria con cerca de trescientos cristianos. Esta teoría se encadena con la teoría de Jacques de Mahieu. La flota templaria habría arribado al continente americano huyendo a través de una ruta vikinga que los propios templarios ya habrían utilizado desde mucho tiempo antes en su búsqueda de plata. Mahieu señala que la Orden del Temple "poseía en el Mediterráneo una gran flota naval, rival de la veneciana, con la que conquistó prácticamente el monopolio de los transportes entre Europa y Oriente medio". Los Templarios tenían l control de importantes puertos en Francia, España y Portugal, además de poseer una gran flota que les permitiría cruzar el Atlántico en ruta a las Américas.

Las teorías de Mahieu aportan datos importantes para resolver la incógnita sobre el origen de la plata con la que la Orden del Temple financió, en menos de cien años, setenta iglesias y ochenta catedrales góticas. Durante los siglos XII y XIII los templarios poseían una fortuna consistente en plata, un mineral muy difícil de obtener por aquellos tiempos en Europa. Los templarios habrían huido hacia América con los tesoros que poseía la orden.


Piedras rúnicas con inscripciones y representaciones vikingas.

En los bajorrelieves de la Capilla de Rosslyn (construida antes de la llegada de Colón al Continente Americano), se encuentra la restante evidencia que apoya esta teoría. En dos pasajes de la historia escultórica que presenta la arquitectura de esta capilla, se pueden observar plantas de maíz y aloe no conocidas en Europa, antes de la llegada de los españoles a América.

En el mes de marzo de 1999 el Ingeniero argentino Fernando Fluguerto Martí, al frente de su grupo Delphos, una Orden Templaria Argentina, presentó una hipótesis basada en una serie de estudios teóricos e investigativos sobre la presencia de los Templarios en el Golfo de San Matías, en la Patagonia Argentina. Este grupo habría encontrado evidencia de un supuesto Fuerte-Puerto Templario, encontrando en las proximidades un enorme bloque de piedra con una cruz en bajorrelieve de aproximadamente un codo por un codo (a la que llamó "Cruz Templaria"), además de otros grabados en sobrerrelieve con la misma cruz y otras imágenes en piedra en los que no falta la representación de la serpiente y símbolos de supuesto origen celta. Todas estas experiencias se encuentran reflejadas en el sitio www.delphos.com.ar

Jaques de Mahieu fue un pionero, con sus arriesgadas teorías, revolucionó el mundo de la antropología. Los cronistas españoles de los primeros tiempos de conquista, como sus predecesores, quedaron deslumbrados ante la presencia de antigua evidencia que denota la presencia del hombre blanco en las Américas. Mahieu conocía ese secreto y dedicó su vida a su comprobación científica.

 

BIBLIOGRAFIA:
1.- El Gran Viaje del Dios-Sol
2.- La Agonía del Dios-Sol
3.- Drakkares en el Amazonas
Jaques de Mahieu-Hachette
4.- The Norse Discovery of America
Anderson Rasmus B. - Norroena Society
5.- They All Discovered America
Charles Boland-Doubleday
6.- Explorations in America Bebore Columbus
Hjalmar Holand-Twayne Publishers

El Quinto Hombre